Visita al jardín melancólico
El día martes 26 de octubre los alumnos de GES
2 hicimos una visita guiada al cementerio municipal de Sant Feliu de Guíxols acompañados por el historiador Josep.
La visita comenzó, en la conocida por los habitantes, la Parroquia de Madre de Dios de los Ángeles. Nuestra primera parada en el monasterio nos introdujo al tema del día, la muerte y una breve explicación de como nuestros antepasados trataban este tema tan tabú en la sociedad actual. Antiguamente la gente en su mayoría creyente (católica al menos en España) al finalizar su vida terrenal eran sepultados, los más importantes dentro de las iglesias, y el resto de personas con menos valor en la sociedad, a sus alrededores. Esto era debido a que en antaño los templos cristianos tenían unas reliquias religiosas y estas posesiones garantizaban una mejor vida en el paraíso después de perecer, cuanto más cerca de estas estaba el cuerpo descansando mejor ibas a vivir.
Con la densidad demográfica en creciente a partir del S.19 debido a las mejoras en la calidad de vida, los benedictinos de Sant Feliu Guíxols cedieron un tercio de sus tierras para crear el actual Cementerio de Sant Feliu
Con esta introducción tras una pequeña caminata nos dirigimos hacia el cementerio donde unas calaveras y antorchas invertidas junto a unos altos cipreses que nos dan la bienvenida. Nos adentramos en el sosiego de las almas en paz. Lo primero que nos invita a la mirada es la capilla, un sitio pequeño con figuras como María y su hijo Jesús, rodeado por nichos con asombrosas cantidades de flores que invoca el pensamiento de que a pesar de las circunstancias el amor por nuestros familiares permanece. También podemos encontrarnos panteones y mausoleos más ostentosos de personas más importantes como Joan Casas, la familia Sibils y el expresidente catalán Josep Irla. Algo que me llamó la atención, como es común en el ser humano, es que también pudimos ver que el cementerio no es solo para la gente católica, sino que también podíamos ver como trataban la muerte otras culturas como por ejemplo la musulmana, tan diferente a occidente. Tradicionalmente los musulmanes para poder llegar al cielo, ellos no se pueden incinerar, ya que se considera pecado así que una vez lavados el cuerpo sin vida se entierra y comúnmente se les coloca un ladrido de pie si esa persona fue una mujer y si fue un hombre de costado. En esa misma parte del cementerio, el cementerio neutro (dónde puedes entrar de manera independiente para ver a tus seres queridos), descansan las personas que en vida no pertenecían a la religión católica.
Alba Bartolomé Hidalgo
Una redacion muy completa y unas fotografias completa.
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